Buscan crear una ley que ampare y proteja a los cuidadores
La misma tiene como objetivo principal el poder brindar un soporte a todas aquellas personas que se encargan del cuidado de hijos o familiares con alguna discapacidad.
Desde TEA Santa Cruz, en conjunto con otras asociaciones del país que bregan por el mismo objetivo, se está diagramando la creación de un nuevo proyecto a través del cual se busca crear una ley que proteja a los cuidadores de personas con discapacidad.
En este marco, la integrante de TEA Santa Cruz, Jessica Gálvez, dialogó con TiempoSur y explicó que «desde la Red Federal TGD Padres TEA del nodo Santa Cruz trabajamos con los nodos que están distribuídos en todo el país. En este caso, estamos trabajando juntos para una ley que cuide la salud mental y que acompañe a las madres y cuidadoras primarias», y sumó: «Por ahí estamos muy dejadas de lado o se está romantizado el tema de que las mamás pueden con todo, se aguantan todo o son super fuertes».
Al respecto de estos estereotipos sobre madres de hijos con discapacidad anteriormente mencionados, Gálvez expresó que, usualmente, las personas que se encuentran a cargo del cuidado de una persona con discapacidad poseen «una vida ajetreada. Pasamos noches sin dormir y situaciones de angustia, miles de cosas, y está romantizado como que somos re fuertes. Yo creo que eso no está tan bueno, porque no es sano para nadie. Hay que demostrar que nosotros sufrimos, renegamos, estamos tristes y ansiosas», remarcó.
La integrante de TEA Santa Cruz contó a este medio que la idea de llevar a cabo este proyecto surge luego de que una de las madres que componen los nodos no pudiera lidiar con el estrés de su vida diaria -tanto con las responsabiliades que conlleva el ser un cuidador al igual que de la vida en general- y decidiera quitarse la vida. «De ahí surge esta necesidad de que se empiece a tomar en serio la salud mental y que no quedemos tan apartadas», añadió.
Otra de las problemáticas que surgen al momento de criar o cuidar a una persona con discapacidad es que muchas de las madres dedican su vida entera al cuidado de sus hijos y luego, cuando estos mueren -teniendo en cuenta que la expectativa de vida no es muy larga dependiendo el diagnóstico- las madres no saben cómo continuar su vida debido a que «nunca pudieron tener un trabajo y, por ende, no tienen siquiera aportes ya que su vida y función eran netamente los hijos», entre otros puntos.
En otro punto, Jessica explicó que el proyecto se encuentra en proceso de elaboración: «Todavía estamos haciendo muchas reuniones con el resto de los nodos a ver qué puntos van a tratar y cuáles van a ser las cosas que se le va a exigir a esa ley», indicó.
Capacitaciones en caso de peligro
Por otro lado, Jessica comentó que -actualmente- se están llevando a cabo una serie de capacitaciones destinadas al personal policial y bomberil para que, ante una situación de emergencia, sepan evacuar a una persona con discapacidad. «(Las capacitaciones) Son obligatorias. Desde el área de Bomberos están armando un lugar de rescate; se trata el grupo especial de bomberos de Zona Sur. Tenemos unos profesionales de primera y gente muy capacitada y con ellos estamos trabajando toda una adaptación de este tema de rescate, que es fundamental, porque este grupo son los que sacan a las personas de un accidente vehicular, de arriba de un techo o del agua. Para todas esas situaciones de peligro lo que nosotros hacemos es adaptarlo a las personas con discapacidad», explicó Jessica.
Por último, la integante de TEA Santa Cruz valoró la gestión del ministro de Seguridad Lucca Pratti, la cual permite llevar adelante este tipo de capacitaciones, por lo que manifestó: «Estamos agradecidos con el ministro de Seguridad y con la buena forma que tiene de trabajar, ya que nos está acercando mucho a la comunidad; ya no estamos trabajando como antes desde una posición superior a la ciudadanía, sino que juntos. El vecino es escuchado y nosotros nos encargamos de sus necesidades. Yo creo que esta parte demuestra el trabajo que nosotros -desde la institución- queremos hacer, que es llegar a ese grupo de personas que por ahí es ignorado por una cuestión de no saber cómo abordarlo».
«Esto es el futuro de nuestros familiares y siempre pensamos que si el día de mañana nuestros hijos, sobrinos o familiares se encuentran en una situación donde necesiten ayuda o ser rescatados, estos profesionales van a estar preparados. Vamos a trabajar no sólo para que sean unos efectivos preparados y profesionales, sino para que sean buenas personas, porque esto también toca el lado de la humanidad y de la empatía, al igual que del respeto a las personas. Se está aprendiendo mucho y lo mejor de todo es que ellos quieren aprender», concluyó.
