Pablo Grasso y Martín Pérez firmaron el convenio de colaboración y se aproxima la apertura de la Casa del Estudiante en Córdoba
El intendente de Río Gallegos, Pablo Grasso, firmó este martes el convenio de colaboración con su par de Río Grande, Martín Pérez, para oficializar la conformación de la Casa de Estudiantes en Córdoba, provincia en la que viven miles de santacruceños y fueguinos que están cursando estudios superiores con el fin de formarse profesionalmente y ahora tendrán un espacio de acompañamiento y contención.
La rúbrica se realizó en Río Grande, Tierra del Fuego, y contó con la participación de los intendentes de Río Turbio, Darío Menna, y de Tolhuin, Daniel Harrington. También asistieron de forma virtual estudiantes que están en Córdoba, quienes resaltaron la importancia de esta decisión de los Municipios de Río Gallegos y Río Grande.
La Casa Río, como se denominó, será un ámbito para los jóvenes, en el que podrán reunirse, compartir experiencias, acceder a talleres de formación, participar de actividades sociales y deportivas y estudiar en un lugar que contará con todas las herramientas.
Este convenio, que se gestó en la unión de las ciudades atlánticas de la Patagonia, contribuirá para fortalecer los lazos entre los jóvenes de la región.
En su discurso, Pablo Grasso dijo que “son dos ciudades con muchas similitudes, hasta en las costumbres. Las personas del sur son solidarias y cálidas. Con Martín (Pérez) vimos que los chicos y las chicas que están en Córdoba también necesitaban este tipo de espacios y decidimos avanzar para conformarlo”.
“Los dirigentes tenemos que escuchar las demandas y estar presentes. Tenemos mucho entusiasmo y es un orgullo para nosotros. Me llamaron muchísimos profesionales que van a colaborar en todo lo que haga falta. Nosotros vamos a acompañar en las políticas que sean necesarias. En tiempos difíciles, nos ayudamos entre nosotros para salir adelante”, remarcó el intendente de Río Gallegos.
Además, el jefe comunal de Río Grande, Martín Pérez, agradeció en primer lugar el sacrificio que hacen los padres para enviar a sus hijos a estudiar. “Debe ser la primera vez que dos comunidades se unen para brindar respuesta y acompañamiento a los jóvenes que están a miles de kilómetros de sus familias”, valoró Pérez.
“Con esta firma vamos a poder replicar la experiencia que tenemos en La Plata. Es una casa que cuando asumimos estaba abandonada y trabajamos para ponerla en condiciones. Ahí van cientos de pibes y pibas a estudiar, a sentirse acompañados y a ser escuchados por nuestros equipos de profesionales. Este tiene que ser el objetivo de la Casa en Córdoba. Hay un Municipio presente”, subrayó.